una visita a la mujer sana proporciona una excelente oportunidad para aconsejar a los pacientes sobre el mantenimiento de un estilo de vida saludable y minimizar los riesgos para la salud. Dado el panorama cambiante y complejo de la atención, en el que muchas mujeres pueden no recibir todos los servicios preventivos recomendados, los obstetras y ginecólogos tienen la oportunidad de contribuir a la salud y el bienestar generales de las mujeres a lo largo de toda la vida proporcionando servicios preventivos recomendados y asesoramiento., Tomar una historia completa (específicamente obtener información detallada sobre los síntomas y antecedentes médicos y ginecológicos anteriores) informará si ciertos componentes del examen físico, incluido el examen pélvico o de mama, están indicados en esa visita e informará la toma de decisiones compartida para estos exámenes. Los antecedentes familiares deben utilizarse como instrumento de evaluación del riesgo y deben completarse y actualizarse periódicamente para garantizar la evaluación más completa de los factores de riesgo personales de la mujer., Otro componente clave de una visita de bienestar para una mujer en edad reproductiva es el desarrollo y la discusión de su plan de vida reproductiva para garantizar que las pruebas médicas y los tratamientos proporcionados estén alineados con sus planes actuales y futuros. Los obstetras y ginecólogos brindan atención a las mujeres a lo largo de toda la vida, y las visitas periódicas a las mujeres sanas también son apropiadas y necesarias para las mujeres perimenopáusicas y posmenopáusicas. Esta opinión del Comité se ha revisado para reflejar la orientación actualizada sobre los componentes del examen físico y las nuevas fuentes de servicios preventivos para la mujer sana.